Las fechas de diciembre siempre nos traen lindos recuerdos, son los días en los que solemos reunirnos con los familiares que no hemos podido ver en un tiempo, ya sea por trabajo, escuela o como ahora, cuando solemos vivir una pandemia. Los tiempos se tornan un poco oscuros, nos damos cuenta de lo afortunados que somos, pero no todos tienen esta dicha, no todos pueden reunirse y cenar un delicioso banquete… muchos no tienen hogar y encuentran consuelo en las almas más puras que vagan por la tierra, nos referimos por supuesto a los animales.
No existió un gato más navideño que el mismo Bob, aquel gatito londinense que iba en las calles buscando un hogar y lo halló en brazos de James Bowen, un joven que intentaba salir de las drogas, pero no lo conseguía, hasta que Bob le dio la fuerza que necesitaba y así ambos se salvaron, forjando una amistad. Aquí te recomendamos su segunda y última película que protagonizó antes de cruzar el puente de arcoíris.
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Basada en los libros de James Bowen A gift from bob y The Little Book of Bob, siendo esta una secuela directa de la película lazada en el 2016, la cual fue protagonizada por Luke Teradaway quien apareció brevemente en un capítulo de la serie The Crown y aquí retoma su papel como Bowen, lo acompañan Anna Wilson, Kristina Tonteri y el mismo Bob, quien saldría por última vez en la pantalla grande antes de fallecer. La película se filmó en Inglaterra.
La historia nos traslada en un recuerdo del mismo James, en la cual recuerda la última navidad que paso con Bob ganándose la vida en las calles y de cómo el mismo Bob lo ayudó a superar todas las adversidades, brindándole fuerza, amistad e inspiración y, en última instancia, enseñándole el verdadero significado del espíritu navideño a lo largo del camino. En su viaje se encuentran con nuevos aliados que se convierten en amigos y desconocidos que se convierten en enemigos. En esta película Bob nos enseña como la magia del perdón puede sanar heridas de mucho tiempo y formar vínculos mucho más estrechos e inclusive llegando a juntar gran cantidad de personas para apoyar su causa. Conocemos diferentes historias de personajes que, aunque sufren, cuando el pequeño gato callejero se cruza en su camino parece proporcionarles la fuerza que necesitaban para seguir adelante, como lo hizo con el mismo James.
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También podemos observar lo duro que fue para ambos en esas fechas, pues James a pesar de haber dejado las drogas y enmendar su vida, tenía que lidiar con el hecho de que no contaba con un trabajo fijo. Sintiéndose inútil para cuidar al pequeño gato, ya que apenas tenían para vivir al día. Ese miedo lo lleva a tener un conflicto con un guardia que solía fastidiarlos y quien lo amenazaría con quitarle a Bob en las fechas previas a Navidad, alegando que el gato debía tener una calidad de vida mejor. Por suerte para James, la misma gente que solía escucharlo y conocerlo decidió reunir firmas para que conservara al gato. Cuidándolo hasta el final de sus días.
No hay duda de que la partida de Bob fue algo que muchos no nos esperábamos y que, al conocer su increíble historia sólo nos hizo amarlo más, pues como se suele decir “Ellos te amarán hasta el final de sus días”. James logró reunir firmas para que en Inglaterra le hicieran un monumento a aquel gatito que le salvó la vida y solía acompañarlo a todos lados, apoyado en su cuello y que daba la mano como símbolo de amistad. No hay, ni existirá un gato como Bob en el mundo.
Por Alan Martínez
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