¿DÓNDE ESTÁ MAPLE?

ENTREVISTA A ADRIANA MONDRAGÓN MAMÁ DE MAPLE

Cuando tenemos a nuestras bendiciones de cuatro patas, siempre anhelamos que se lleven bien con otros perros y personas para una convivencia pacífica y sana, una en la que no tengamos ese pendiente de que el animalito pueda agredir o ser agredido por otro o muerda a alguien al sentirse nervioso por no estar acostumbrado a la convivencia con personas. También queremos que se comporten lo mejor posible cuando no estamos y que obedezcan las ordenes clásicas de “sentado”, “quieto”, “da la pata” y otras más, pero debemos recordar que, sin importar la raza, cada perrito es diferente y muchos incluso cuando son adoptados y sufrieron algún trauma, suelen tener problemas para adaptarse a su nueva vida.

Por ello, algunos dueños recurren a entrenadores particulares que ayudan a nuestro canhijo a mejorar su comportamiento, pero para esto uno debe ser muy meticuloso y no confiarlo a cualquier persona. Por ello presentamos aquí el caso de Maple, un perrito que fue a un supuesto campamento para mejorar la conducta y muy tristemente fue supuestamente devuelto en una urna. Adriana Mondragón, la madre de este perrito, habla en exclusiva sobre la terrible situación que vivió y por la que aún busca justicia y una respuesta de los responsables (que sólo pueden ser llamados desgraciados).

1- ¿Quién era Maple? Maple es nuestro cachorro shiba inu, es el hermano de Waffle, es el miembro más pequeño de nuestra familia. Maple es mucho para nosotros, él al igual que Waffle son quienes nos sacan de la rutina, quienes nos han ayudado a valorar el tiempo y también a disfrutarlo, a querer, procurar y amar de una manera diferente. Todo eso es Maple para mí y para mi novio.

2-¿Cómo surge la idea de llevarlo al campamento?

Una vez que Maple cumplió su cuadro de vacunación comenzamos a sacarlo de paseo, pero nos dimos cuenta de que se intimidaba al encontrarse con otros perros. Buscamos a un entrenador que nos pudiera ayudar a mejorar ese comportamiento. Nuestra intención siempre fue que Maple se relacionara de la mejor manera, que tuviera todo el equilibrio que necesitaba para ser un perrito feliz. En casa tenía alimento, amor, cuidados, atención, pero buscar a un profesional que nos ayudara a que Maple pudiera tener una mejor presentación con otros perritos, nos parecía un extra necesario.

Llegamos por recomendación a la empresa que hoy en día eliminó sus redes sociales. Empezamos el entrenamiento en casa desde el mes de marzo. Tuvimos una primera sesión en donde se presentó y nos habló de su experiencia, la cual incluía estudios en el extranjero y una extensa experiencia en capacitar perros de asistencia y confiamos. Confiamos y le abrimos las puertas de nuestra casa, el entrenador venía a nuestro domicilio y trabajábamos con él en nuestra casa, en el parque, en las calles cercanas.

3-¿En qué momento se percataron del cambio en él?

Después de varias sesiones fue el mismo entrenador quien nos propuso el campamento con una duración de dos semanas pues ese era el tiempo ideal. Nos dijo que sus mismos perros iban a ayudar a Maple a tolerar a otros pues estos no eran reactivos. Nunca nos habíamos alejado de Waffle o Maple, ambos llegaron a nuestras vidas en pandemia así que siempre habían estado con nosotros, sin embargo, confiamos.

Maple acudió a dicho campamento una primera vez durante dos semanas; sin embargo, a su regreso notamos que ahora lanzaba mordidas a otros perros, cuando antes no lo hacía. Llamamos al entrenador para entender qué era lo que había pasado y de nueva cuenta acudió a nuestro domicilio. Nos dijo que era Waffle quien lo empoderaba y que por eso se ponía así Maple, nos dijo que cambiáramos la pechera por correa y también, entre las recomendaciones que nos dio, nos mencionó que Maple y Waffle fueran al campamento, así Maple reforzaría lo aprendido y posiblemente Waffle dejaría de empoderarlo.

Lo pensamos, tuvimos un par de sesiones más y al final aceptamos que solo Maple regresa, pues Waffle se encontraba en un tratamiento y con comida especial en ese momento. La historia ya es bien conocida: Maple no regresó a casa. No lo volvimos a abrazar. No nos recibió brincando. Lo que sucedió fue que los encargados nos dieron una urna llena de cenizas.

4-¿Cuántas veces tuvieron que insistir para recibir una respuesta del campamento? Fuimos muy insistentes. No nos importó la hora, nosotros queríamos salir al veterinario en el que supuestamente estaba siendo atendido Maple, pero siempre recibimos negativas. Nos decían que no tenían señal, no nos mostraron fotos, no había nada que comprobara los hechos. Sólo sabíamos que una serpiente había mordido a Maple según la historia que nos contaron.

Al no recibir una explicación, decidimos acudir a su domicilio, pero cuando íbamos de camino nos pidieron verlos en el Deportivo Xochimilco. Ahí nos entregaron una urna aun cuando en repetidas ocasiones mencionamos y prohibimos esa cremación, la cual fue llevada a cabo en tiempo récord y de madrugada. Todo fue muy sospechoso. Nos negamos a creer lo que estaba pasando.

5-¿Cuál fue tu sentir al recibir la noticia y la urna con los restos de Maple? Dolor, frustración, enojo. Hay una mezcla de muchos sentimientos al enfrentarse a una situación como esta en donde crees que hay profesionales a cargo, personas capacitadas, pero sobre todo humanas.

Hoy sabemos, gracias a la investigación que la Fiscalía de la CDMX ha llevado a cabo, que nada de lo que nos contaron durante la madrugada estaba sucediendo. No hubo una picadura de serpiente, no podían llevarnos al veterinario porque no hubo ningún veterinario que hubiera atendido a Maple esa madrugada. Todo fue planeado por el entrenador y su pareja, esta última es quien se encargaba de cobrar, agendar citas, mantener comunicación y enviar las fotos y videos que nos mostraban el estado en el que Maple se encontraba.

Las mismas investigaciones han revelado que se entregó un cuerpo y se solicitó un servicio de cremación desde una semana antes, sin embargo, hay ciertos indicios que revelan una nueva línea de investigación: el cuerpo que fue entregado pudiera no ser el de Maple.

6-Ese supuesto entrenador, ¿Se sabe algo de él?

Sabemos que eliminaron las redes del negocio de entrenamiento canino que manejaban. Sabemos que no nos dijeron la verdad y que las causas de la supuesta muerte de Maple no ocurrieron como nos las dieron a conocer. Eso es lo que sabemos.

7-¿Qué medidas legales tomarán al respecto?

Desde el día en el que todo esto nos ocurrió́ iniciamos un proceso legal de la mano de un equipo de abogados que se acercaron a nosotros y nos han brindado toda su ayuda.

8-¿Cuál es el objetivo del movimiento #DóndeEstáMaple?

Levantar la voz. Nuestra historia hizo que se dieran a conocer más casos como estos, a hacer saber que no es un caso aislado y que este es un modus operandi para robar mascotas. #DóndeEstáMaple es nuestra pelea para encontrar la verdad, es darle voz a quienes no pueden hablar, es la búsqueda de un miembro de nuestra familia que nos arrebataron de la manera más insensible.

9-¿Qué podrías decir a la gente para evitar una situación así? Escuchar nuestra historia, conocer la de otras personas más. Saber que esto existe y puede pasar es un primer paso. Esperamos que al saber lo que le pasó a Maple pueda ayudar a otras familias a no pasar por esto.

Este fue un caso donde se ha afirmado de un nuevo modus operandi, en le que las mascotas son robadas para ser explotadas o cosas inimaginables. Es nuestro deber como animalistas dar a conocer esta clase de historias, por más que nos duelan o nos enfurezcan y que las autoridades cumplan con su deber para llevar a estos criminales a la justicia. Desde el fondo de nuestro corazón lamentamos lo sucedió con Maple y esperamos que la ley se haga cumplir para llevar paz a la familia del perrito.

Por: Alan Martínez