Aunque el vínculo con los animales es algo que el ser humano ha tenido a lo largo de su historia, en ocasiones este va más allá de las mascotas caseras, pues se suelen encontrar casos donde los compañeros son seres exóticos. No se recomienda que un animal salvaje sea domesticado, pues estos son impredecibles en su comportamiento, aunque sean educados desde nacimiento su instinto florecerá tarde o temprano, así que si esta en tus posibilidades evitar tener uno de estos seres, ayudarías mucho a la conservación de estas especies, pero si no pudiste y no quieres que el animal sufra, aquí te decimos cómo puedes tenerlo sin que padezca.
Te recomendamos no tener este tipo de mascotas exóticas, pues aunque los erizos son tan hermosos que quisiéramos uno, ellos pertenecen a su hábitat natural, además muchos de estos animales son producto del tráfico de fauna, que es una forma de maltrato animal que además desequilibra sus hábitats naturales, pone en peligro de extinción a las criaturas y además estos animales deberían crecer en su ambiente natural. Si por alguna razón te vieras obligado a cuidar uno de ellos, te recordamos que requieres cuidados especiales.
1-La dieta humana les hace daño, así que su dieta se basa en algunos insectos, como los grillos.
2-La proteína en exceso los hace engordar, hasta el punto en el que ya no pueden enrroscarse, por eso es importante llevar su alimentacion al margen.
3-El pequeño erizo debe vivir en una jaula lo bastante grande y de base firme sin reja, ya que puede ahorcarse, además debe estar limpia en todo momento y tener una camita, un bebedero de botella (no de balín) y un palto bajo.
4- Mantenlo en una temperatura de 22º a 28°. Utiliza una placa térmica o focos de calor. Si la temperatura baja, se puede enfermar.
5- Desparasítalo dos veces al año. Córtale las uñas; si no lo haces, le crecerán muchísimo y se le enroscarán siendo un peligro para él mismo.
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